El estudio realizado -en noviembre y diciembre del año pasado- por la Dirección de Fiscalización del CPLT contempló el análisis de 324 instituciones de la administración central del Estado, que fueron evaluados respecto a la información que deben publicar mensualmente en sus sitios electrónicos, lo que se conoce como “Transparencia Activa”, que contempla 14 aspectos a informar. Para ello, el organismo ha desarrollado una metodología que le asigna un puntaje distinto según la valoración que le otorgan los ciudadanos a esta información, recogida mediante diversos estudios.
En la evaluación pasada, el ítem que obtuvo el más bajo puntaje fue “los subsidios y beneficios que ofrece el organismo, y en especial la forma de acceder a ellos”, pero este año repuntó en el primer lugar. Por el contrario, dentro de la más baja fue la publicación de auditorías realizadas a la ejecución presupuestaria del servicio y que efectúa la Contraloría General de la República, detectando que “este organismo las deja a disposición en su sitio electrónico, pero los servicios en su gran mayoría no las publican en los propios”. Asimismo, en el sector Salud y mayoritariamente entre los hospitales autogestionados, estos últimos tienen un presupuesto propio que es administrado por la entidad y no a través del Servicio de Salud correspondiente.
Cabe recordar, que el Consejo realizó una primera evaluación a los 57 hospitales autogestionados en el país en septiembre de 2011 y desde entonces se han registrado mejoras. (Véase relacionado)
El promedio general de las instituciones fiscalizadas alcanzó a 93,37% con un puntaje máximo de 100, que en comparación con el año pasado es 0,5% más bajo, lo que justifica el Consejo, debido a que “en la medición 2011 se incorporaron los 57 hospitales autogestionados y se agregaron variables como la consistencia entre la información que publican las instituciones en sus sitios electrónicos y la que existe sobre estos en otros portales del Estado”.
En cuanto a los resultados por tipo de servicios, destacan a quienes obtuvieron las más bajas calificaciones en 2010, esto es los gobiernos regionales y las intendencias, que elevaron su desempeño significativamente, conforme informó el CPLT al “trabajo de seguimiento y apoyo a todas estas instituciones, a petición de estos mismos organismos tras la primera fiscalización”
Finalmente, declaran que el cumplimiento de las obligaciones de Transparencia Activa es una tarea dinámica, donde todos los meses los organismos sujetos a ellas deben actualizar la información requerida, por lo que recalcaron el haber “desarrollado una herramienta de autoevaluación que está a disposición de todos los servicios en una extranet, de manera de facilitar el cumplimiento” exigido.
Vea los resultados de la Evaluación Nacional de Transparencia Activa.
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