Para mejorar las condiciones de vida de la población y financiar los derechos sociales es fundamental el crecimiento económico, cuyos pilares son la actividad empresarial privada y una política pública que incentive la inversión y el emprendimiento; lo que se ve favorecido por un sistema de economía de mercado.

Lamentablemente son numerosos los sectores políticos que se oponen a este sistema —que ellos denominan peyorativamente “modelo neoliberal”— pero que no dan a conocer, explícitamente, por cual lo reemplazarían. Se supone que sería por un sistema de economía planificada, el que donde ha sido implantado solo ha acarreado miseria y pérdida de la libertad, como ha ocurrido en países tales como la República Democrática Alemana, Cuba y muchos otros.

Tales sectores se dedican a discutir cómo obtener recursos mediante reformas tributarias, y no a cómo generarlos a través del crecimiento económico.

La propuesta de texto constitucional que elabore la Convención Constitucional debería incluir un orden público económico como el establecido en la Carta Fundamental actualmente vigente, propio de una sociedad libre y que tanto crecimiento y progreso ha acarreado para Chile.

Adolfo Paúl

Abogado