Olor a marihuana que emana de vehículo controlado y que motiva consulta a sus ocupantes no es una pregunta auto incriminatoria, resuelve la Corte Suprema.
Los agentes efectuaron un control vehicular, momento en que el acusado al ser consultado por el hedor a cannabis que emanaba desde el interior del móvil, reconoció transportar la sustancia y “tener un poco para la venta”, indicio suficiente para el control de identidad y posterior detención del encartado.