Rusia prohíbe el “movimiento internacional LGBTQ” por considerar que es una “organización extremista”, por decisión del Tribunal Supremo.
La decisión del Tribunal se tomó en una audiencia cerrada a los medios de comunicación y ha sido objeto de críticas por parte de activistas LGBTQ. Estos sostienen que contradice las afirmaciones oficiales de que Rusia no discrimina a las personas LGBTQ y que les otorga derechos en igualdad de condiciones.