Tras seis meses de discusión, la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados dispuso despachar el proyecto de ley que crea el sistema de Educación Pública y que modifica otros cuerpos legales (boletín 10368).
El pasado 19 de abril, la comisión se abocó a tratar diversas materias relacionadas con el fortalecimiento de los servicios locales y a debatir las responsabilidades que debe tener el Estado respecto de sus propios establecimientos. Asimismo, se acordó concluir la votación particular del proyecto el lunes 2 de mayo, con el fin de que este sea despachado a la Comisión de Hacienda de la Cámara y posteriormente enviado a la Sala dentro del mismo mes. 
Sobre la discusión que se dio en torno al proyecto, el presidente de la Comisión, diputado Alberto Robles manifestó que el Ejecutivo ha tomado nota de los diferentes puntos, “porque cada uno de nosotros tiene visiones distintas que se han hecho presentes en el debate, entonces hay temas relevantes como el financiamiento, donde han prometido enviar un proyecto de ley especifico”. 
Con respecto a las comunidades locales, manifestó que se ha buscado entregarles mayor poder en términos de que tengan más participación en las políticas educacionales locales. Sostuvo, además, que su preocupación, en particular, es la educación parvularia “ya que no me gusta que la primera infancia quede dentro de los sistemas locales, porque creo que es lo más importante, en términos educacionales. Entonces, no me parece que estos sistemas tengan la obligación de dar la formación preescolar, porque los directores se van a preocupar más de los liceos donde están los alumnos adolescentes que requieren más tiempo”.
Por su parte, la diputada Cristina Girardi, indicó que su preocupación fundamental va a en la línea de analizar las consecuencias de que existan establecimientos deficientes en este nuevo sistema. “Yo soy de la idea de que eso ya no se debe permitir. Perdí una indicación que planteaba que si había una escuela en situación deficiente o insuficiente, por no haber aplicado medidas, había que sacar al director. Por supuesto todos encontraron que era muy extremista esa posición y, hoy día, la sanción es el cierre del establecimiento. Siempre he estado en contra de esa medida, porque cuando una escuela está en situación insuficiente no es porque los niños sean malos o los profesores, sino porque el Estado no ha prestado la ayuda necesaria para que esa escuela salga adelante. Creo que en eso hay que poner énfasis”, enfatizó. 
En esta línea, el diputado Giorgio Jackson planteó que en caso de que se produzca el cierre de algún establecimiento, espera que esto sea por consideraciones estratégicas, pero no porque tenga problemas de calidad. “Si existen estas complicaciones lo que hay que hacer es poner todos los esfuerzos para que esa calidad mejore y no dejar abandonados a los niños y sus familias cerrando el establecimiento”, dijo. 

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