Noticias

Opinión.

Caso español: Condenado un joven de Cáceres a 26 años de prisión por grabar y difundir imágenes de mujeres y menores en una web porno.

De octubre de 2015 a abril de 2016 publicó un total de 29 vídeos, quinientas noventa y ocho fotografías distribuidas en 49 álbumes y 115 vídeos favoritos.

25 de diciembre de 2018

En una reciente publicación del medio español Confilegal se da a conocer el artículo “Condenado un joven de Cáceres a 26 años de prisión por grabar y difundir imágenes de mujeres y menores en una web porno”.
Se sostiene que el juzgado de lo Penal número 2 de Cáceres condenó a 26 años de prisión a un joven de esta localidad que grabó y difundió imágenes de mujeres, incluidas menores, en una web porno de Estados Unidos.
De octubre de 2015 a abril de 2016 publicó en esta página de difusión mundial, un total de 29 vídeos, quinientas noventa y ocho fotografías distribuidas en 49 álbumes y 115 vídeos favoritos, representando a mujeres adultas y adolescentes en poses de contenido sexual o realizando actividades sexuales.
En todas ellas, según describe la sentencia, “públicamente fomentaba el odio hacia las mujeres y niñas, denigrando a todas y animando al público a que también lo hiciera”.
Su perfil ‘Pastorculion’ fue cerrado el 7 de abril de 2016 por la propia dirección de la web a instancias de la Guardia Civil, una vez que se inició el procedimiento “ante la gravedad de lo allí publicado”. Se llegaron a contabilizar 17.826 accesos a dicho perfil, 145 suscriptores, 351 amigos y 243.359 reproducciones de sus vídeos.
La juez Pérez Vañuelos le acusa de un delito de odio, 24 delitos contra la integridad moral, delito de difusión de material pornográfico y otro de defraudación de telecomunicaciones, éste último porque con ánimo de lucro, utilizó la wifi de su vecina durante todo el tiempo que usó el perfil.
Asimismo, ha decretado el alejamiento de las víctimas y comunicación con ellas por un periodo de dos años, así como indemnización de 300 euros a cada una de ellas y decomiso del ordenador, teléfonos y discos duros intervenidos.

Material conseguido en grabaciones, redes e internet

El texto dice que en su perfil de la web se hacía llamar ‘Pastorculion’ con la leyenda “Soy el pastor de todos!!El Pastorculion de todos mis seguidores!!! Chequea mi perfil y encontrarás las mejores perras y putas en fotos y videos”.
Las fotos y vídeos que publicó, los había obtenido grabando a las personas directamente en el gimnasio, la calle o la facultad donde estudiaba, a través de Internet, así como de las redes sociales Facebook o Instagram, pese a carecer de la autorización de las personas que en ellas aparecían para su modificación y difusión.
Como señala la sentencia, el acusado “obtuvo y utilizó, con pleno conocimiento de que carecía de autorización para ello”, imágenes de perfiles privados de mujeres adultas y de menores, “con la finalidad de atentar contra la intimidad de cada una de ellas y en su perjuicio”.
Una vez en su poder, para “humillar y denigrar” a sus víctimas subió estas imágenes y las catalogó en su perfil de pastorculion, difundiéndolas e infligiendo a cada una “un trato degradante y atentando contra su integridad moral” al incluir sus fotografías en una página de pornografía y con las denominaciones que él mismo efectuaba, “ocasionándoles una grave afección moral, al ser fácilmente identificables por sus conocidos y amigos”.
También se hizo socio de un gimnasio donde realizó grabaciones de usuarias y de la monitora mientras hacían ejercicios, “mostrando fundamentalmente las nalgas y los pechos pero claramente identificables al grabarles sus caras”.
El acusado catalogaba este contenido bajo clasificaciones explícitamente pornográficas e igualmente y “con la finalidad de humillar, denigrar y atentar contra la integridad moral” de las mujeres que allí incluía catalogaba las fotografías con nomenclaturas de tipo denigrante.
En el caso de los vídeos, especificaba la calidad porno de cada uno, en la mayoría del 80%, e identificaba el contenido con frases humillantes para las mujeres que aparecían en las imágenes o haciendo referencia a cómo se había conseguido la grabación tales como “grabada con cámara oculta tremendo, grabada con cámara oculta en la calle o culazo apretadito en leggins por la calle”.

Víctimas identificables

A continuación el texto aclara que todas las mujeres que aparecían en su material eran perfectamente identificables por sus fotografías pero, además, incluía comentarios que las hacía aún más identificables como sus perfiles en redes sociales. Con todos estos detalles, animaba a los usuarios de la página a seguirlas e injuriarlas.
En la pestaña de comentarios de su perfil publicó mensajes como este: “atención amigos, las nuevas fotos del álbum llamado “Españolita muy puta” son de una perrita de Instagram, está deliciosa ahí tienen capturas en el álbum del nombre que ella usa en Instagram así que síganla amigos y denígrenla llámenla puta y de todo perra esa”.
Además, finaliza el texto, los usuarios registrados le pedían todo tipo de material, tanto de pornografía de mayores como de menores.

 

RELACIONADOS
*Estados Unidos: Prisioneros de Iowa demandan su derecho constitucional a ver pornografía…
*CC de Colombia acogió tutela deducida por mujer que grabó un video pornográfico que fue distribuido sin su autorización…

 

 

Te recomendamos leer:

Agregue su comentario

Agregue su Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *