El Consejo de la Unión Europea publicó once puntos respecto a las conclusiones sobre la agresión no provocada e injustificada de Rusia contra Ucrania.
El Consejo condena enérgicamente la agresión militar no provocada e injustificada de la Federación Rusa contra Ucrania, ya que estima que la acción militar viola gravemente el derecho internacional, así como los principios de la Carta de las Naciones Unidas, además, advierte que las acciones rusas atentan gravemente contra la estabilidad del continente europeo y del resto de las naciones.
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Añade que, Rusia es responsable absoluto por todas las pérdidas humanas y materiales que sufra Ucrania, por lo que expresa su solidaridad con cada uno de los habitantes afectados y pide a las tropas rusas permitir el acceso y la asistencia humanitaria segura y sin obstáculos a todas las personas necesitadas.
El Consejo exige a Rusia el cese inmediato de sus acciones militares, el retiro inmediato de las fuerzas y equipos militares de todo el territorio de Ucrania y respete plenamente la integridad territorial, la soberanía y la independencia de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas.
Asimismo, el Consejo condena la participación de Bielorrusia en la agresión contra Ucrania y lo insta a que se abstenga de tales acciones y cumpla con sus obligaciones internacionales, de lo contrario sufrirá sanciones individuales y económicas.
El Consejo Europeo reitera su apoyo inquebrantable a la independencia, soberanía e integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas, toda la Unión Europea brindará apoyo político, financiero, humanitario y logístico. Por ello, pide a todos los países que no reconozcan a las dos autoproclamadas entidades separatistas y que no las faciliten ni los ayuden de ninguna manera.
Agrega que, cree firmemente que el uso de la fuerza y la coerción para cambiar las fronteras no tiene cabida en el siglo XXI, pues las tensiones y los conflictos deben resolverse exclusivamente a través del diálogo y la diplomacia. En ese sentido, reitera su compromiso con la soberanía y la integridad territorial de Georgia y de la República de Moldavia y continuará una fuerte coordinación con socios y aliados, dentro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el G7.