La moción, patrocinada por las diputadas María Francisca Bello Campos, Mercedes Bulnes, Lorena Fries, Javiera Morales, Marcela Riquelme, Camila Rojas, Clara Sagardia, Emilia Schneider, Consuelo Veloso y Gael Yeomans, modifica la ley N° 20.370, General de Educación, para prohibir la exigencia de uniformes escolares diferenciados por género entre niños, niñas y adolescentes.
Las autoras de la iniciativa la justifican señalando que en la actualidad el requisito obligatorio de que las niñas en edad escolar usen falda impone una conducta social a éstas que no va acorde con la creciente fuerza que ha ido adoptado el movimiento LGTBIQA+. Dicho movimiento cuestiona los roles de género y que se clasifique a una persona en uno o en otro. Del mismo modo este movimiento exige que se reconozca la existencia de personas que no se identifican con el sexo biológico con el que nacieron.
Acto seguido señalan que la obligatoriedad del uso de la falda en niñas además de ser un elemento incómodo para ellas por cuanto restringe su movimiento, contribuiría a ser un factor de discriminación entre los estudiantes que no se enmarquen en dichos códigos binarios.
Lo anterior impone desafíos en materia educacional que irían más allá del ajuste de mallas curriculares y que implicarán cambios sociales, tales como baños universales y la obligatoriedad de uniformes que no sean diferenciados por sexo.
La idea matriz del proyecto es modificar la ley N° 20.370, ley general de Educación, con el objeto de prohibir la exigencia de uniformes diferenciados por género para promover el desarrollo integral físico y psicológico de los escolares.
La iniciativa consta de un artículo y una disposición transitoria.
El artículo primero modifica el artículo 46, letra F), de la ley 20.370, Ley General de Educación, que impone la obligación a los establecimientos educacionales de tener un reglamento interno, al que la norma legal que se propone deberá incorporarse que los establecimientos educacionales no podrá establecer diferencia alguna en cuanto al uniforme exigido a niños o niñas.
Noticia Relacionada
Por otro lado, el artículo transitorio le otorga a los establecimientos educacionales el plazo de un año desde la publicación de esta ley para adecuar sus reglamentos internos en el sentido indicado.
El proyecto de ley pasó a la Comisión de Educación de la Cámara Baja.
Véase tramitación del boletín N° 15.736-04
Somos distintos, y diferentes.
Cual es el problema en vestirnos diferentes??
hasta cuando se pierde el tiempo en estas cuestiones…?? en el Parlamento habiendo tantas otras prioridades.
Que estupidez. Tenemos al país entero conmocionados por hechos graves, y las «diputadas» gastándose la dieta en estupideces.