Solventar los altos costos del tratamiento de la enfermedad de Ménière, así como implementar programas de apoyo y acompañamiento a los pacientes, que les permita recuperar su autonomía, es el objetivo de una resolución.
El requerimiento, planteado por la diputada Sara Concha, contó con respaldo unánime de la Cámara (139 votos). En él, se pide al Presidente Gabriel Boric incorporar dicha patología en el Programa de Garantías Explícitas de Salud (GES).
El texto expone que la enfermedad de Ménière es un trastorno del oído interno que podría estar relacionado con la acumulación de líquido. Es una afección crónica que no tiene cura y que no presenta síntomas todo el tiempo.
Sin embargo, presenta “ataques” o “episodios” que pueden durar entre 20 minutos a 2 horas, con mareos y sensación de tener un zumbido en el oído. Junto a esto, se experimenta vértigo, con graves problemas de equilibro al caminar. Además, puede estar acompañado de sudoración, náuseas y vómitos.
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Todo ello, provoca en las personas falta de autonomía por lo imprevisible de los ataques. Al ser una enfermedad crónica sin cura, las personas necesitan un tratamiento de alto costo para poder controlar los ataques. Y, en casos más graves, es necesario una intervención quirúrgica, con cirugías que también tienen precios elevados.
Se agrega que no existe ayuda del Estado para estos pacientes, así, les resulta muy difícil optar a una pensión de invalidez, por presentar síntomas esporádicos.