Luego de tres semanas de suspensión el juicio por el ataque de Charlie Hebdo de 2015 se reanuda. El motivo de la suspensión ordenada por el Tribunal tiene que ver con que varios de los acusados dieron positivo por Covid-19.
Cabe recordar que, actualmente, son 14 personas las que se encuentra sometidas a juicio, acusadas de haber ayudado a los autores del ataque al diario satírico Charlie Hebdo, con el asesinato de una policía municipal y cuatro rehenes en un supermercado judío.
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El principal sospechoso, Ali Riza Polat, ha alegado su descuerdo con su no comparecencia personal ante el tribunal, sino que a través de un enlace de video, por encontrarse actualmente enfermo del virus. Alega, tanto él como los defensores públicos de varios de los imputados, que se niega a formar parte del triste espectáculo que sería un juicio penal sin la presencia personal y directa de los acusados.
Lo anterior, tiene su antecedente en una ordenanza firmada por el Ministro de Justicia de Francia, Eric Dupond-Moretti, señalando que, la parte final de un procedimiento penal (alegatos y requisiciones) podría tener lugar, excepcionalmente cuando el acusado no se encontrara físicamente presente pero conectado a través de una videoconferencia, en consideración de la crisis sanitario provocada por la propagación del coronavirus.
En la presentación (denuncia de emergencia) dirigida al Ministro de Justicia se sostiene que, obligar a un hombre enfermo, que corre el riesgo de años de prisión, a dar sus declaraciones finales frente a un micrófono, entre cuatro paredes, es indigno en el estado de derecho francés, y ningún juez debería poder dar un veredicto sin tener que mirar a los ojos de la persona que recibe su condena.
De hecho, varias asociaciones de Magistrados y Abogados han expresado su rechazo ante el dictamen emitido por el Ministro.
Vea texto íntegro de la publicación en el Diario Oficial de Francia, (en francés).