La CIDH, su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión y la OACNUDH condenaron los reiterados actos de persecución por parte de las autoridades nicaragüenses en contra de medios de comunicación, sus dueños, periodistas, y prensa, en el contexto de las elecciones presidenciales de Noviembre 2021.
Los tres organismos referidos han identificado que al menos 12 periodistas nicaragüenses se han visto forzados a salir al exilio por temor a represalias en su contra. Por otra parte, refieren que las autoridades nacionales han iniciado acciones administrativas y penales contra miembros de la principal organización dedicada a la defensa de la libertad de expresión, la Fundación Violeta Barrios de Chamorro. La organización debió cesar su trabajo en febrero de este año, en virtud de la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros que considera “agentes extranjeros” a la ONG’s que obtengan fondos internacionales, y les prohíbe trabajar en temas de política interna y externa del país, sin que estos sean definidos de manera precisa.
La Ley de Regulación de Agentes Extranjeros, junto con la Ley Especial de Ciberdelitos fueron criticadas en una carta enviada por relatores de Naciones Unidas y la CIDH, en la que expresan que estos cuerpos normativos “presentan problemas graves y fundamentales de compatibilidad con las obligaciones de Nicaragua en virtud del derecho internacional.
Por otra parte, refieren que varios periodistas y dueños de medios de comunicación han sido sometidos a amenazas, detenciones y allanamientos.
La Comisión, la Relatoría Especial y la OACNUDH expresan que “Estas reiteradas conductas constituyen graves ataques y restricciones indebidas en contra del derecho a la libertad de expresión, que en algunos casos constituyen actos de censura. Todo ello afecta no solamente a los derechos de periodistas y propietarios de medios de información, sino también al derecho de toda la ciudadanía a tener acceso a una información plural.”
Enseguida, puntualizan que la comunicación de información sobre asuntos de índole pública y política es indispensable para garantizar el ejercicio de los derechos de participación política, lo que implica la existencia de una prensa libre, capaz de comentar cuestiones públicas sin censura, así como de informar a la opinión pública.
Finalmente expresan que “el hostigamiento, la censura, la estigmatización y persecución oficial a la prensa, las detenciones y los procesos legales arbitrarios contra medios, periodistas y organizaciones que defienden la libertad de prensa son incompatibles con la protección de la libertad de expresión y generan un clima generalizado de miedo y autocensura. En el marco de un proceso electoral resultan además especialmente graves, e incompatibles con la democracia y con las obligaciones internacionales de Nicaragua en materia de derechos humanos.”
La Comisión, su Relatoría y la OACNUDH exhortaron al Gobierno a que cese toda conducta que afecte a los periodistas y medios de información.
Vea texto del comunicado y de la carta enviada por la CIDH y relatores de Naciones Unidas.
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