Tras un debate marcado por los alcances del programa de Asentamientos Precarios y los traspasos de recursos a fundaciones, la Sala de la Cámara aprobó la partida del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, que posee un foco importante en los recursos destinados al Plan de Emergencia Habitacional (PEH).

La discusión se centró en los fondos destinados al referido programa, el que presenta dineros por $57.892 millones. Lo anterior considerando la necesidad de perfeccionar la fiscalización. Ello teniendo en cuenta que el item presenta una variación positiva de un 24.0%, respecto del presupuesto 2023.

En la oposición los discursos estuvieron marcados por los casos de corrupción. En ese sentido, las y los parlamamentarios del sector responsabilizaron, con matices, a las autoridades de la cartera, por el desvío de recursos y la baja ejecución presupuestaria.

Al respecto, resaltaron los problemas de probidad ocurridos en programas de asentamientos precarios, reclamando la adopción de medidas concretas para evitar que hechos cómo los conocidos se repitan.

Los parlamentarios oficialistas en tanto, llamaron a aprobar el presupuesto para la cartera, que tiene el mayor aumento proporcional del erario nacional. Insistieron en la necesidad de respaldar estos recursos, en beneficio de los chilenos que no tienen hogar.

Asimismo, hicieron un llamado a legislar con responsabilidad, sosteniendo que lo importante es que la discusión no se utilice políticamente, sino que se concentre en las problemáticas de las personas que requieren solución habitacional.

Por su parte, el ministro de Hacienda, Mario Marcel relevó los beneficios del Plan de Emergencia Habitacional. Informó que para este ítem se proyecta construir más de 78 mil viviendas el próximo año.

Destacó que este ministerio se fijó metas concretas ligadas a la inversión y a soluciones habitacionales, lo que se monitorea e informa continuamente. Sostuvo que más allá de las críticas por la ejecución presupuestaria, la comparación con otras carteras da cuenta de un correcto manejo.

Aspectos centrales de Vivienda

En su conjunto, la partida del Ministerio de Vivienda considera ingresos y gastos por $4,92 billones. Ello implica una variación total neta de 11.9%, respecto al presupuesto 2023.

Entre los principales desafíos del Ministerio de Vivienda para el próximo año está la concreción del Plan de Emergencia Habitacional (PEH). Este busca incrementar la construcción de viviendas, a partir de los programas preexistentes (fundamentalmente, DS 19 y DS 49), a los que se han introducido paulatinamente modificaciones.

Asimismo, se busca determinar nuevas prioridades, tales como la planificación y la recuperación del sentido de lo público y las instituciones.

Del mismo modo se pretende diversificar las opciones habitacionales y modernizar la relación del Minvu con las empresas. Asimismo, fortalecer la interacción con la ciudadanía y estrechar la vinculación entre la política habitacional y lo urbano.

Otro desafío de la cartera es propiciar un debate respecto de la ciudad, históricamente ausente. Adicionalmente, desarrollar un número significativo de obras urbanas para mejorar la calidad de vida. La idea es dinamizar la vida social y alentar la ocupación de los espacios públicos.

En ese plano, el PEH pretende saldar el 40% del déficit habitacional, que se estima en 650.000 viviendas. Acá se espera recuperar el rol del Estado en la planificación y gestión de la ciudad, teniendo, entre sus principios rectores, el diversificar las formas de acceso.

Énfasis presupuestarios

En lo línea con lo anterior, el presupuesto para el año venidero otorga un fuerte impulso a la vivienda industrializada, la microradicación, las cooperativas, la vivienda para trabajadores, el programa de arriendos justos, la vivienda municipal, la autoconstrucción, el sistema de ejecución directa impulsado por los Serviu y el programa Construyendo Barrios.

Es así que el énfasis principal del presupuesto de la cartera es el referido PEH, que muestra un mayor incremento llegando a $3.59 billones, lo que representa un 73% del total. Su concreción posibilitará avanzar a través de diferentes líneas.

Segundo está el énfasis en la gestión del Minvu, que apunta al mejoramiento de viviendas y entorno para vivir en comunidad. El objetivo es superar el déficit cualitativo, cuyas principales líneas de acción estarán orientadas al retiro de asbesto, acondicionamiento térmico, subsidios fotovoltaicos. También para viviendas tuteladas y a la implementación de la Ley 21.442, que aprueba nueva normativa de copropiedad inmobiliaria.

En tercer lugar, está la ejecución del Plan Ciudad Justa y la elaboración de Planes Maestros de Gestión Urbano-Habitacional, que refuercen las soluciones habitacionales del programa de emergencia. De tal forma, el presupuesto de la cartera considera la actualización de los instrumentos de planificación territorial, la consolidación de los programas de barrios y pequeñas localidades, así como las obras urbanas y los convenios de transferencia.

Otros aspectos destacados del presupuesto del Ministerio de Vivienda son la recuperación de suelo e inmuebles para las familias. A ello se suma la modernización de la gestión interna y participación.

Vea  mensaje  y tramitación del Boletín Nº16330.