En el contexto de las recientes modificaciones constitucionales y legales introducidas por el Gobierno de Hungría, y luego de un permanente monitoreo a la situación política y económica en dicho país durante los últimos meses, la Comisión Europea decidió interponer tres procedimientos judiciales acelerados en contra de dicho país en relación a la legislación que entró en vigencia a comienzos de año y que afectaría la independencia del Poder Judicial, del Banco Central y de las autoridades responsables de la protección de datos personales.
El órgano de Bruselas hace recaer la primera infracción en la rebaja de la edad de jubilación que afectaría a los jueces y fiscales húngaros, incluyendo a los magistrados de la Corte Suprema, de los actuales 70 a los 62 años de edad, lo cual vulnera la Directiva europea sobre igualdad de trato en el empleo por cuanto se establecería una discriminación en el trabajo por motivos de edad, siendo que el Gobierno húngaro no ha presentado una justificación objetiva para esta medida. En cuanto a la segunda infracción, ésta se centró en las disposiciones de la nueva Constitución húngara y de la ley del Banco Central húngaro que establecen que el Ministro del ramo podrá participar en las reuniones del Consejo Monetario del Banco y recibir por anticipado el orden del día de dichas reuniones, que introducen modificaciones de aplicación inmediata al régimen de remuneraciones del Gobernador del Banco Central y al estatuto sobre destitución de este funcionario y de los miembros del Consejo Monetario, todo lo cual afecta la plena independencia del Banco Central establecida en el Tratado sobre el Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE). Finalmente, la última infracción se hizo recaer en la decisión de crear un nuevo organismo nacional de protección de datos personales, poniendo término anticipado al mandato, de seis años iniciado el año 2008, del actual Comisario responsable, y también en las nuevas normas que permiten a la autoridad política destituir al nuevo supervisor de manera arbitraria, todo lo cual vulnera el principio de independencia de las autoridades encargadas de la protección de datos personales, garantizado en el TFUE y en la Carta de Derechos Fundamentales.
El procedimiento se inició mediante el envío a Hungría de tres cartas de emplazamiento, ante lo cual las autoridades de dicho país disponen del plazo de u mes para responder a las preocupaciones expresadas por la Comisión, todo lo cual corresponde a la fase precontenciosa del procedimiento de control de los actos de los Estados miembros.
Cabe recordar que la Comisión Europea es una institución independiente de los Gobiernos de los Estados miembros de la Unión Europea, de la cual Hungría forma parte desde el año 2004, y que encarno los intereses de la Unión como tal, una de cuyas funciones es velar por el cumplimiento de los tratados sobre la Unión Europea por parte de los Estados miembros
Ver texto íntegro de la nota de prensa.
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