La Corte Suprema invalidó el fallo de la Corte de Apelaciones de Concepción que, confirmando la sentencia de primer grado dictada por el Tercer Juzgado Civil de esa ciudad desestimó la demanda de indemnización de perjuicios por falta de servicio interpuesta por los familiares de una interna que atentó contra su vida dentro de un centro penitenciario. En su lugar acogió la acción indemnizatoria y condenó a la demandada a resarcirles a los actores el daño moral por la falta de medidas tendientes a precaver el desenlace fatal de la reclusa.
El fallo de primera instancia rechazó la demanda al considerar el juez que no se encuentra acreditada la falta de servicio de Gendarmería , desde que aún si se estimara que las gendarmes encargadas de su custodia hubiesen desatendido a la reclusa por algunos minutos no está probado que el resultado no se hubiese producido.
La Corte de Apelaciones de Concepción confirmó el fallo en alzada al estimar que no existe prueba suficiente e idónea acerca de la falta de servicio imputada a Gendarmería.
La Corte Suprema invalidó la sentencia de segundo grado al considerar que se omitió el análisis y ponderación de toda la prueba rendida, la que permite concluir que la demandada incurrió en la falta de servicio imputada, porque ni ella ni su personal demostraron haber cumplido con el deber de resguardar la integridad física y salud de la interna, en especial, por cuanto estaba en conocimiento de las amenazas de suicidio y múltiples autolesiones cometidas por la reclusa lo que exigía de su parte una mayor supervisión luego de que fuera ingresada a la celda de aislamiento.
El fallo puntualiza que si bien la falta de servicio de la demandada no puede ser sindicada como la causa precisa de la muerte de la reclusa, la misma debe ser calificada como un factor determinante del resultado dañoso, porque pudiendo haber interrumpido el curso de tales hechos, mediante la implementación de medidas de resguardos, no lo hizo.
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El máximo Tribunal acogió el recurso de casación en la forma interpuesto por los recurrentes y en la sentencia de reemplazo condenó al Fisco a indemnizar a los demandantes en la suma de $100.000.000.- por concepto de daño moral.
La sentencia fue acordada con el voto en contra del Abogado Integrante Álvaro Quintanilla, quien fue del parecer de desestimar el referido arbitrio por cuanto la sentencia no carece de los vicios invocados en el recurso de casación en la forma deducido por la parte demandante.
Vea el texto íntegro de la sentencia de la Corte Suprema Rol Nº14707-2020, sentencia de reemplazo, de la Corte de Concepción Rol Nº1229-2019 y del 3º Juzgado Civil de Concepción Rol NºC-3556-2017.