El alcalde de la ciudad de Nueva York (Estados Unidos), Eric Adams, anunció una demanda contra 17 empresas de autobuses y transporte involucradas en el traslado de inmigrantes a este Estado, en la que exige el pago de $708 millones de dólares para cubrir los costos asociados a la atención de estas personas. Acusa que este es parte de un plan impulsado por el Estado de Texas.
Adams sostiene que estas empresas han violado la ley estatal al no asumir los gastos relacionados con el cuidado de los inmigrantes, destacando que la ciudad no puede enfrentar sola los desafíos creados por las “estrategias políticas de Texas”. En un comunicado expresó lo siguiente: «La ciudad siempre se hará parte para gestionar esta crisis humanitaria, pero no podemos soportar solos los costos de las imprudentes estratagemas políticas del estado de Texas”.
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El alcalde también anunció una orden ejecutiva a fines de diciembre, destinada a mejorar la coordinación de las compañías de autobuses chárter que transportan a los nuevos inmigrantes, con el objetivo de garantizar su seguridad y bienestar y el del personal de la ciudad que los recibe.
La demanda citó la sección 149 de la ley de Servicios Sociales de Nueva York, que establece la obligación de transportar fuera del estado o mantener por cuenta propia a cualquier persona traída a Nueva York con el fin de convertirla en una carga pública.
«La ley de servicios sociales de Nueva York prohíbe exactamente lo que hacen estas compañías de autobuses. Están participando en un plan de mala fe orquestado por el estado de Texas para trasladar los costos de la atención de personas necesitadas a los neoyorquinos y abrumar nuestro sistema de servicios sociales. La ley es clara: al participar en este plan imprudente, estos las compañías de autobuses asumen la responsabilidad de esos costos”, señalaron representantes de Nueva York.