El Departamento de Finanzas y Administración de Arkansas (Estados Unidos) revocó una política que permitía a los titulares de licencias de conducir e identificaciones estatales elegir su género de forma voluntaria, incluyendo la opción neutral «X». Esta medida ha sido criticada por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en inglés), que catalogó esta decisión como una amenaza a la seguridad y dignidad de las comunidades transgénero, intersexuales y no binarias.
Según la nueva política, los titulares de licencias e identificaciones ahora deberán elegir un género binario «masculino» o «femenino», basado en su certificado de nacimiento original o enmendado. Aquellas identificaciones que ya cuenten con la preferencia «X» seguirán siendo válidas hasta su próxima renovación, momento en el cual deberán modificarse para reflejar el género del certificado de nacimiento del titular.
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La gobernadora de Arkansas, Sarah Huckabee Sanders, respaldó este cambio como una cuestión de «sentido común», argumentando que solo existen dos géneros. El secretario del Departamento justificó la reversión de la política como parte de la misión de las autoridades estatales de mantener la seguridad de las comunidades y prevenir el fraude, afirmando que la política anterior no estaba respaldada por la ley estatal y que nunca fue sometida a comentarios públicos o revisión legislativa.
Sin embargo, esta medida ha sido rechazada por los defensores de los derechos civiles LGBTQ+, quienes la ven como un intento más de los legisladores conservadores de restringir los derechos de las minorías sexuales. Se suma a una serie de leyes similares promulgadas en otros estados.
En un contexto más amplio, mientras algunos estados han ampliado las opciones de identidad de género en documentos públicos, otros han restringido esta posibilidad. Sin ir más lejos, recientemente el Estado de Florida promulgó una ley que prohíbe a sus ciudadanos elegir, actualizar o cambiar su género en las licencias de conducir.
“El propósito de esta regla es garantizar que las personas y organizaciones que dependen de la información de identificación contenida en una licencia de conducir o tarjeta de identificación reciban la información de género más precisa y completa que refleje la información de género de la persona indicada en el certificado de nacimiento, pasaporte del titular o documento de Seguridad Nacional”, señalaron las autoridades de Arkansas.