El Senado del Estado de Idaho (Estados Unidos) aprobó recientemente el Proyecto de Ley No. 710 de la Cámara de Representantes, conocido como la Ley de Protección de Bibliotecas y Escuelas Infantiles. Esta medida busca regular el acceso a ciertos materiales en bibliotecas y escuelas públicas, con el objetivo de proteger a los menores de edad de contenido considerado perjudicial, como el pornográfico.
El proyecto de ley prescribe que las instituciones educativas y bibliotecas públicas no deben promover ni poner a disposición material que se considere inapropiado para los niños. Además, contempla la posibilidad de iniciar acciones legales si no se retira o reubica el material señalado como perjudicial dentro de un plazo específico luego de una queja.
La normativa ha generado un intenso debate entre los legisladores y la comunidad. En este sentido, la Asociación de Bibliotecas de Idaho expresó su preocupación, pues en su opinión esta normativa podría tener consecuencias negativas, como la desviación de recursos hacia disputas legales y restricciones en la selección de materiales.
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Algunos senadores también han expresado inquietudes sobre el proyecto de ley. Lo han calificado como una amenaza para las bibliotecas del Estado, mientras que otros sugieren que los padres deberían desempeñar un papel más activo en la supervisión de los contenidos que consumen sus hijos.
El destino final del proyecto de ley depende ahora del gobernador de Idaho, Brad Little, quien decidirá si lo aprueba o lo veta. Si se convierte en ley, tendrá un impacto significativo en el acceso a la información y la libertad de expresión en el Estado.
“El Proyecto no representa los valores de Idaho de control local, derechos individuales y responsabilidad personal. El lenguaje vago del proyecto de ley tendrá un efecto paralizador sobre los materiales incluidos en las colecciones de la biblioteca. Las comunidades rurales y las pequeñas bibliotecas se verán afectadas de manera desproporcionada por las sanciones de causa de acción civil”, lamentó Lance McGrath, presidente de la Asociación de Bibliotecas de Idaho.
“La pornografía no tiene cabida en las escuelas ni en las bibliotecas públicas. Ningún niño debería encontrarse con libros sexualmente explícitos en escuelas o bibliotecas comunitarias financiadas por los contribuyentes. Estamos agradecidos de que los legisladores estatales hayan dado otro paso para abordar este problema, y tenemos la esperanza de que el gobernador promulgue esta legislación”, celebró Blaine Conzatti, presidente del Centro de Política Familiar de Idaho.