A raíz de los graves hechos ocurridos el pasado 10 de abril en las inmediaciones del Estadio Monumental, donde dos personas fallecieron tras incidentes relacionados con el partido entre Colo-Colo y Fortaleza de Brasil, la Cámara de Diputadas y Diputados realizó una sesión especial para abordar la violencia en los estadios.
Durante el encuentro, parlamentarios de diversos sectores políticos lamentaron el deceso de los hinchas e insistieron en la necesidad de realizar cambios estructurales para erradicar a los delincuentes que se infiltran en las barras bravas y afectan el desarrollo del fútbol profesional.
La Sala aprobó seis resoluciones enfocadas en mejorar la coordinación para prevenir hechos de violencia, crear una mesa técnica investigadora y otorgar urgencia a la tramitación del proyecto que modifica la Ley N° 19.327 sobre derechos y deberes en espectáculos deportivos, actualmente en el Senado. También se pidió la remoción del delegado presidencial de la Región Metropolitana, Gonzalo Durán, y una revisión completa de los protocolos de seguridad para eventos masivos.
En el debate, la diputada Marisela Santibáñez calificó los hechos como “una muestra del fracaso institucional”, señalando además que se deben cortar los vínculos entre dirigentes y barristas, y propuso separar a la ANFP de la Federación de Fútbol de Chile. El diputado Andrés Celis sostuvo que ningún ente ha sido capaz de frenar a los grupos violentos, mientras que Andrés Giordano pidió no estigmatizar a la hinchada legítima y llamó a trabajar en conjunto con la ANFP.
Diputados como Henry Leal y Johannes Kaiser defendieron el actuar de Carabineros y criticaron la tendencia a culpar siempre al Estado, señalando que el fútbol ha sido capturado por la delincuencia.
Desde el Ejecutivo, el delegado presidencial Gonzalo Durán defendió el operativo de seguridad y aseguró que se actuó conforme al protocolo, advirtiendo que evacuar a 40 mil personas en medio de desórdenes habría sido riesgoso. El ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, valoró la sesión y explicó que los clubes deberán asumir mayores responsabilidades con la entrada en vigencia de la ley de seguridad privada.
El Director General de Carabineros, Marcelo Araya, defendió el accionar policial y señaló que toda la documentación fue puesta a disposición de las investigaciones. Por su parte, el presidente de la ANFP, Pablo Milad, anunció nuevas medidas como el Registro Nacional de Hinchas y la próxima instalación de torniquetes con control biométrico en los estadios.
La sesión reflejó la preocupación transversal del Congreso frente a la violencia en el fútbol y abrió el debate sobre el rol de los distintos actores en la búsqueda de soluciones duraderas.