Por Benjamín Avaria, Universidad de Desarrollo
El 19 de noviembre entró en vigor la ley 21.389, que crea el Registro Nacional de Deudores de Pensiones de Alimentos.
El Registro de Deudores está compuesto por todos los deudores de alimentos que deben tres cuotas seguidas o cinco discontinuas que fueron informados por los tribunales de familia. Podrán acceder a este registro los deudores y las beneficiarias de los alimentos, a través de su clave única.
Es decir, «el mismo deudor, la persona beneficiaria de la pensión de alimentos o su representante legal y los organismos del Estado. La idea es generar una serie de consecuencias hacia los deudores que se encuentren en este registro”, explica Nicole Sepúlveda, abogada experta en Derecho del Trabajo y fundadora de la consultora psicojurídica “Defiende tus Derechos”, dedicada al Derecho Familiar.
¿Cuáles son las consecuencias para los deudores ingresados en el registro?
Si el deudor de alimentos pide un crédito bancario por más de 50 UF no se le va a entregar, a menos que acredite que pagará la deuda de alimentos con este dinero. Si vende una casa, no se le va a inscribir a menos que se acredite que parte del pago irá destinado al pago de la deuda de la pensión de alimentos. Lo mismo con los vehículos motorizados, no podrán renovar la licencia de conducir, tampoco los pasaportes. Esas son las medidas más fuertes para presionar que se haga efectivo el pago de la deuda.
¿Cómo se puede asegurar el pago efectivo de la deuda?
La única forma de asegurarlo es que el pago se acredite en los tribunales de familia donde se encuentra la deuda e informar al registro civil quienes son los encargados de asegurar el pago.
¿De qué forma se les informa a las personas que han sido inscritas en este registro?
Las personas que van a pasar al Registro Nacional de Deudores son aquellas que deben tres cuotas seguidas de los alimentos o cinco discontinuas. Cuando el tribunal de familia se da cuenta de esto emite una resolución. Esta se les notifica a las partes involucradas por medio de una carta a la dirección de contacto que aparezca en el sistema o al domicilio. Desde la recepción, el deudor tendrá tres días para oponerse. Si no se opone o no paga va a pasar directamente a ser deudor de alimentos y a formar parte del registro.
¿Por qué se hace necesaria la creación del Registro de Deudores?
Los tribunales de familia se vieron sobrepasados con las deudas de alimentos, ya que las medidas que tenían para garantizar el pago de los alimentos eran ineficaces. Las principales medidas eran el arresto nocturno, el cual por la pandemia se hizo mucho más complicado cumplirlo. La retención de la licencia de conducir que también era difícil de cumplir, ya que carabineros iba al domicilio y negaban que el deudor viviese ahí. Por la poca capacidad de darle cumplimiento a estas sanciones es que se crea este registro. De esta forma las instituciones gubernamentales y bancarias tienen acceso al registro y así se pueden crear medidas más fuertes para que los deudores cumplan. Así, le va a dar más miedo a un deudor el no cumplir con su obligación.
¿Desde el inicio de esta normativa en qué aspectos se han visto mejoras?
A pesar de que es una normativa nueva, ha traído beneficios en el sentido de que los deudores se están acercando a cumplir con el pago de sus deudas por el temor a aparecer en este registro. Esto puede repercutir en sus trabajos, ya que también se le notifica al empleador.
¿Has trabajado con algún caso en el que se vea involucrado el registro de deudores?
Tuve el caso de que se actualizó la deuda de alimentos de un patrocinado mío, este patrocinado no objetó dentro del plazo, tampoco pagó la deuda, porque no tenía la liquidez para hacerlo. Luego de esto, se certificó y se envió el oficio al registro civil para que sea inscrito en el registro.