El Gremio Nacional de Dueños de Botillerías interpuso ante la Fiscalía Nacional Económica una denuncia apuntando un «grave desabastecimiento» de parte de las distribuidoras, y acusándolas de estar privilegiando al canal de supermercados, quienes, a su vez, estarían vendiendo estos productos al pequeño comercio «fijando» altos precios.
Cabe señalar, según la denuncia, que desde inicio de septiembre de 2020, todos los asociados al gremio, «junto a sus delegaciones en Tocopilla, Calama y San Antonio, hicieron presente el grave y generalizado desabastecimiento respecto de diversos productos, todos bebidas alcohólicas».
Entre esos productos, nombran algunas marcas de cerveza, como Corona y Budweiser, distribuidas en Chile por Cervecería AB InBev, y también Heineken y Royal, distribuidas por CCU.
Las mencionadas cervezas, «a la fecha de la presentación de este denuncio, siguen teniendo serios problemas de stock y despacho para abastecer a las botillerías, minimarkets y en general todos los comercios tradicionales y/o pequeños con expendio de alcoholes».
Sin embargo, se afirma que ante este supuesto quiebre de stock, «todos los productos señalados se encuentran desde septiembre del año pasado y hasta la fecha, completamente abastecidos en todos los supermercados a nivel nacional».
La acción apuntó a que los mismos supermercados «pasan a ser los abastecedores del pequeño comercio, fijando sus precios, estableciendo promociones imbatibles para cualquier botillero y por ende este último debiendo ceñirse a estos, para seguir compitiendo en los precios, pero con márgenes de ganancia mucho más bajos y posibles quiebras, frente a supermercados».
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La denuncia busca que se inicie un procedimiento investigativo desde la FNE como ente persecutor, quien logre resolver, si es que es posible hacer un requerimiento o no al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) solicitando sanciones en contra de las distribuidoras que están denunciadas.
Sin embargo, respecto a la reunión con la FNE, los líderes de la asociación le hicieron ver a la autoridad las implicancias de la situación, pero sostienen que “la respuesta no tuvo el mismo sentido de urgencia con el que nosotros plateamos el problema”, según el abogado de la Asociación de dueños de Botillerías de Chile. Esto, debido a los plazos más largos que maneja la FNE para investigar este tipo de casos.