La Comisión de Justicia de la Cámara de los Diputados de Italia aprobó una serie de enmiendas a un proyecto de ley impulsado por parlamentarios oficialistas, que prohíbe a los ciudadanos italianos alquilar vientres en el extranjero, una medida que afectaría principalmente a las parejas del mismo sexo.
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Si bien la maternidad subrogada es delito en Italia desde 2004, las enmiendas aprobadas, apoyadas activamente por el gobierno de Giorgia Meloni, hacen extensiva esta prohibición al alquiler de vientres en el extranjero, una práctica realizada comúnmente por italianos pertenecientes a la comunidad LGBTI que buscan sortear las restricciones impuestas en su país.
Las enmiendas aprobadas califican el uso de vientres alquilados como un “delito universal”, lo cual amplía su gravedad y su nivel de persecución. En la actualidad, la normativa vigente castiga con multas de entre 600 mil y 1 millón de euros a quien “en cualquier modo, realice, organice o patrocine la comercialización de gametos o embriones en territorio italiano”. Los infractores incluso arriesgan penas de hasta 2 años de cárcel.
Para ser ley, el proyecto aún debe cumplir con trámites legislativos pendientes. En primer lugar, deberá ser votado en el pleno de la Cámara de Diputados, este 19 de junio. De ser aprobado en esta instancia, pasará al Senado para su aprobación definitiva, lo cual se considera muy probable dado que el oficialismo tiene mayoría en esta cámara.