Noticias

imagen: media.licdn.com
Por afectar la libre competencia.

Demanda a Live Nation Entertainment por presuntas prácticas monopólicas en la industria del espectáculo se presenta por el Gobierno de Estados Unidos y otros Estados.

Se acusa a Live Nation de desviar eventos de música en vivo a otros lugares si estos no firman con Ticketmaster, empresa matriz de Live Nation. La compañía supuestamente coaccionó al socio comercial Oak-View Group para advertir a las locaciones que perderían contratos si no firmaban con Ticketmaster.

27 de mayo de 2024

El gobierno de los Estados Unidos y una decena de Estados presentaron una demanda antimonopolio contra Live Nation Entertainment, acusando a la empresa multinacional de monopolizar el mercado de entretenimiento en vivo, perjudicando así a artistas, lugares y asistentes a conciertos.

La demanda se basa en supuestas violaciones de los artículos 1 y 2 de la Ley Sherman, una legislación antimonopolio de 1890 que regula la competencia y prohíbe los monopolios injustos. El artículo 1 de la Ley Sherman declara ilegales los contratos que restrinjan el comercio, mientras que el artículo 2 establece que cualquier intento de monopolizar el comercio constituye un delito menor.

La demanda identifica a los «grandes anfiteatros y servicios auxiliares» y a los «servicios de promoción vendidos a artistas que actúan en dichos anfiteatros» como mercados relevantes bajo la Ley Sherman. Se alega que Live Nation obliga a los artistas que desean actuar en grandes lugares a contratar también sus servicios promocionales, restringiendo así la competencia en el mercado de servicios de promoción.

Además, se acusa a Live Nation de desviar eventos de música en vivo a otros lugares si estos no firman con Ticketmaster, empresa matriz de Live Nation. La compañía supuestamente coaccionó al socio comercial Oak-View Group para advertir a los lugares que perderían contratos si no firmaban con Ticketmaster.

La demanda también alega que Live Nation retrasó la venta de entradas a través de plataformas competidoras y se negó a publicitar eventos en lugares que utilizan otras plataformas de venta de entradas, y que impuso contratos exclusivos a largo plazo, que van de tres a 14 años, sobre una porción significativa de las entradas disponibles.

La empresa adquirió anfiteatros y grandes festivales de música, reduciendo así las opciones de los artistas para buscar proveedores alternativos.

Varios Estados, entre ellos Arkansas, Arizona y Nevada, se han unido a la demanda, alegando que Live Nation ha violado también las leyes estatales sobre prácticas desleales y prohibiciones de monopolios.

El vicepresidente de Asuntos Corporativos de Live Nation, respondió a través de una publicación en un blog, alegando que la compañía no es un monopolio debido a que las tarifas de servicio que cobra no son indicativas de precios monopólicos. Sostuvo que los monopolios se definen por las «ganancias» derivadas de los «precios» excesivos impuestos a los consumidores, algo que, según él, no aplica a Live Nation en comparación con otras grandes empresas de servicios.

Vea demanda.

Te recomendamos leer:

Agregue su comentario

Agregue su Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *