En una reciente entrevista realizada a Andrés Briceño, gerente general de Track Group, compañía mundial de soluciones de monitoreo, nos responde en qué consiste el monitoreo telemático, si solo se aplica como medida cautelar, qué tan confiable es esta tecnología, desde cuándo se aplica, cómo opera en otros países, entre otras preguntas.
1. ¿En qué consiste el monitoreo telemático? ¿En qué casos se puede decretar?
El monitoreo telemático comenzó a operar en 2013.
Los objetivos del servicio de monitoreo telemático son reducir el hacinamiento en las cárceles, prevenir la reincidencia criminal, mejorar la reinserción social, prevenir el aprendizaje delictivo, entregar alternativas a la encarcelación que sean eficientes y responsables y proteger, resguardar y salvar a víctimas de violencia intrafamiliar.
Las tobilleras electrónicas cuentan con un sistema de geolocalización que permite brindar más seguridad a las víctimas de violencia de género. Gracias a su eficaz sistema de monitoreo en tiempo real, es posible advertir que el agresor ingrese a las zonas establecidas por los jueces que ordenan la medida preventiva. Tanto el agresor como la víctima reciben además un aparato receptor que funciona como un teléfono celular con GPS, con la App Empower que les permite estar geolocalizados en tiempo real.
El monitoreo telemático además:
– Ofrece más alternativas de reinserción manteniendo sus lazos familiares, afectivos y su actividad laboral o educativa, el 94% de los usuarios no delinque durante su sentencia.
– Documenta los incumplimientos de orden de alejamiento, violación de zonas de inclusión o exclusión, para informar al órgano judicial correspondiente.
– Reduce en forma importante la reincidencia en comparación con personas que han estado privadas de libertad.
– Disminuye en gran medida el trabajo de las policías, los cuales no tienen que destinar recursos ni personal para control de cumplimiento de penas. (Hoy en día se estiman 6000 horas para control domiciliario), con el monitoreo telemático no hay gasto en control y solo acude al domicilio ante requerimiento del centro de monitoreo por situaciones graves de incumplimientos asociados a riesgos de víctimas.
– Se puede decretar en casos de penas sustitutivas conforme a la ley 18.216 y la ley 21.378 para medidas cautelares en temas de violencia intrafamiliar
2. ¿Solo se aplica como medida cautelar?
El sistema de monitoreo telemático permite tener un control efectivo y en tiempo real de aquellas personas condenadas sometidas a penas en libertad (penas sustitutivas), controlando no sólo sus movimientos, sino que el cumplimiento de las condenas en su totalidad. Esto está en funcionamiento en Chile, de manera pionera en Sudamérica, desde el año 2014 de forma efectiva, controlándose hoy alrededor de 4,300 personas.
En libertad vigilada Intensiva existen alrededor de 500 condenados hoy, entre Penas Mixtas y Libertad vigilada intensiva como tal, algunas de las asociadas a Victimas (Ejemplo: VIF). Es importante destacar que la ley es MANDATORIA en monitoreo telemático para condenas de Penas Mixtas.
Para el caso de medidas cautelares y conforme lo que dicta la ley 21.378, los sujetos de control (agresores) son monitoreados las 24 horas del día, manteniendo el alejamiento que la justicia disponga, tanto de la agredida (víctima) como de todos los lugares donde ella habitualmente se encuentre (domicilio, lugares de trabajo, estudio, etc…). Esto permite que la victima recupere la tranquilidad que le fue arrebatada y vuelva a vivir en un entorno seguro gracias a esta solución que emite las alertas tempranas que nunca existieron en el pasado.
3. ¿Cuándo se empezó a aplicar el monitoreo por tobillera electrónica?
Desde noviembre del 2013 a la fecha y el primer usuario se instaló en septiembre del 2014. El monitoreo telemático es una plataforma única que conecta los dispositivos de forma segura y sin interrupciones, los cuales entregan información y valor confiable para su análisis.
4. ¿Por qué no se ha popularizado este sistema de prestación?
El uso de soluciones como las tobilleras electrónicas, representan hoy el más eficiente sistema de protección de víctimas, gracias a un monitoreo ininterrumpido y confiable, que arroja alertas inmediatas que evidencian la cercanía del agresor para que las autoridades lo conminen a alejarse de la víctima.
Consideramos que uno de los principales motivos por la falta de expansión o popularidad es debido a la poca confianza existente en los medios de tecnología, toda vez que esta solución no impide que el portador pueda delinquir, sino que permite mantenerlo siempre identificado, como una de las medidas más efectivas de disuasión y convencimiento, además de economizar los tiempos y gastos de las investigaciones de las fiscalías al tener toda la información a disposición.
5. ¿Qué tan confiable es la tecnología detrás de estas tobilleras?
La ley que establece el monitoreo telemático para los casos de Violencia Intrafamiliar (VIF) comenzó a aplicarse en el mes de marzo del 2022.
El monitoreo 24/7 permite brindar tranquilidad y seguridad a víctimas y una disminución de femicidios en casi un 80%. En la actualidad, en lo que a penas sustitutivas se refiere, existe un cumplimiento del 82% donde se consideran como incumplimiento todos aquellos eventos que generan alarmas y/o alertas de cualquier tipo durante su periodo de cumplimiento de condena.
El porcentaje de vulneración del sistema oscila en torno al 2%, o sea, todos aquellos que intentan evitar cumplir con la condena por medios subrepticios, a la fecha y a más de 70.000 instalaciones, menos de 200 usuarios aproximadamente han cortado correa del dispositivo, con las consecuentes alarmas y procesos judiciales que de ello se derivan.
Un punto en extremo importante es que del 100% de las víctimas monitoreadas hoy, ninguna ha sido agredida desde que comenzaron a ser beneficiarias de esta solución y se encuentran completamente protegidas, con una efectividad o cumplimiento del objetivo fundamental de un 100%.
6. ¿Qué pasa si un formalizado con tobillera no respeta la prohibición de acercamiento?
El sistema crea una zona geográfica «móvil» alrededor del propio teléfono inteligente de la víctima que funciona en conjunto con otra zona geográfica “móvil” con la tobillera electrónica de los delincuentes asociados para proporcionar una notificación de alerta temprana si los delincuentes intentan violar sus órdenes de restricción.
En el caso de que un delincuente con una tobillera se acerque a una distancia menor o igual a la ordenada por la corte de su víctima, asignada con la aplicación Empower, se genera una alarma de estilo de alerta, seguida rápidamente por el contacto de la policía que guía a la víctima a un lugar seguro. Al mismo tiempo, la policía envía unidades a las ubicaciones de la víctima para intervenir y por sobretodo protegerla.
Al brindar una alerta temprana a las víctimas, no solo se brinda la oportunidad de fortalecer sus programas de supervisión de violencia doméstica, sino que también permite que las víctimas recuperen la confianza y la tranquilidad.
Con el sistema y sumado a la app Empower, que alerta al centro de monitoreo en caso que el agresor esté cerca de alguna de sus víctimas y haya decidido ignorar las medidas disuasivas, la tasa de supervivencia de las mujeres ante un incidente incrementa de forma dramática, eliminando el “factor sorpresa” que es ampliamente utilizado por los agresores para atacar a las víctimas en sus momentos más vulnerables.
7. Las tobilleras dependen de un sistema de monitoreo ¿Quién tiene acceso a esta plataforma? ¿Puede la víctima de VIF monitorear al formalizado?
A la plataforma solo tiene acceso Gendarmería de Chile por intermedio de sus centros de monitoreo, adicionalmente Carabineros de Chile cuando se requiere su actuar (usualmente en casos de monitoreo con víctimas). Excepcionalmente Track Group para solucionar temas técnicos de apoyo, soporte y mejoras, las que se hacen permanentemente para incrementar el nivel de servicio y por ende de control.
Si bien las vícitimas están siendo permanente monitoreadas por el sistema, ellas no pueden monitorear al formalizado. En este caso pensemos el nivel de stress al que sería sometida la vicitima y su entrono si algo asi pudiera ocurrir; este sistema ha sido creado de manera tal que la victima no sea contactada excepto solo en casos de peligro inminente, creando así la tan ansiada tranauilidad y retorno a la vida que por tanto tiempo tal vez estuvo esperando.
Los objetivos del servicio de monitoreo telemático ofrecido por Track Group son dentro de otros, reducir el hacinamiento en las cárceles, prevenir la reincidencia criminal, mejorar la reinserción social, prevenir el aprendizaje delictivo, entregar alternativas a la encarcelación que sean eficientes y responsables y proteger, resguardar y salvar a víctimas de violencia intrafamiliar.
8. ¿Se piensa utilizar estas tobilleras para otros delitos?
Si bien las utilidades son variadas y abarcan desde la medicina, a la industria agrícola y la automotriz, este servicio se caracteriza por la especificidad enmarcada en el ámbito penal, incluyendo condenados e imputados; en este sentido esto puede, de crearse las leyes y normas para ello, ser empleado en violencia juvenil, reinserción social de menores, etc.
9. ¿Cómo opera este sistema de tobilleras electrónicas en otros países?
Opera en Estados Unidos, Canadá, México, Bahamas, Reino Unido, Arabia Saudita, Vietnam, Nueva Zelanda, Sudáfrica y Chile, todo para entregar tranquilidad a las víctimas por medio de nuevas tecnologías de supervisión.
El sistema de monitoreo electrónico funciona de modo exitoso en todos los países donde se ha aplicado, a modo de ejemplo Nueva Zelanda, país pionero en innovación carcelaria y reinserción social de ex prisioneros, el uso del monitoreo telemático ha contribuido en gran parte a la reducción de la población penal y a una disminución sostenida en la reincidencia de delitos.
En el caso de nueva Zelanda, el año 2016 contaba con un 40.5 % de la población penal bajo este sistema. Y los beneficios son claros: una menor tasa de reincidencia, un menor costo para el Estado y una increíble índice de reaprehensión al momento de intentar quitarse la tobillera. El departamento de correccionales neozelandés dio a conocer en 2016 que, mientras un condenado en prisión podía costarle al Estado entre $239.17 a $307.53 diariamente, uno con reclusión en el hogar podía le costaba $59.87, vale decir un 80% menos. Finalmente, el índice de reaprehensión en los casos de que el condenado se quite el aparato de monitoreo oscila entre el 99% y el 99.5%.
En España, Brasil y Paraguay, el uso mayoritariamente es para controlar y monitorear a los acusados y condenados por VIF. En el caso de Suecia luego de sufrir por un tema de sobrepoblación penal, cerraron el 25% de los recintos carcelarios luego de 5 años de aplicado el uso de las tobilleras electrónicas.