Grandes Juristas

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Duncan Kennedy

Es uno de los fundadores del Movimiento Critical Legal Studies (Estudios Críticos del Derecho).

Por Diego Cubillos, U. Central

Nació en el año 1942, en Washington D.C, es abogado de la Universidad de Yale y Licenciado en Economía de la Universidad de Harvard.

Fue profesor titular de la Universidad de Harvard entre los años 1976 y el 2015.

Ha sido reconocido a nivel internacional por diversas universidades con el grado de doctor honoris causa, entre ellas la Universidad de Ámsterdam el año 2005; la Universidad de Los Andes de Colombia en el año 2010; Université de Québec à Montréal el año 2011; y el  Institut d’Etudes Politiques de Paris en el 2012.

“Critical Legal Studies” (CLS)

Entre la década de los años sesenta y setenta, en la Facultad de Derecho de la Universidad de Yale, Estados Unidos, surge un movimiento intelectual jurídico y político denominado por sus integrantes como Critical Legal Studies (CLS), dentro de sus fundadores encontramos al destacado profesor de la Universidad de Harvard Duncan Kennedy, quien dirige dicho movimiento intelectual.

Los Critical Legal Studies según Duncan Kennedy son una red, un grupo de personas que están en estrecho contacto entre sí, que comparten cierta voluntad de conocer y discutir el trabajo de los otros, y que comparten algunas actitudes. Así mismo, manifiesta que es grupo predominantemente de izquierda[1].

El movimiento de los CLS tiene sus raíces en el realismo jurídico y principalmente se plantea realizar una crítica interna de la razón jurídica estadounidense de los años sesenta y setenta que abarca el estudio de la desigualdad social, el feminismo, el multiculturalismo y la educación jurídica.

Las tesis principales se los CLS son:

1. Énfasis en la dimensión histórica y social del Derecho, entendiendo a este último como una autonomía relativa.

2. Defensa de la interdisciplinariedad frente a la exclusividad de la dogmática jurídica.

3. Acento en la dimensión política del Derecho y del discurso jurídico contra su supuesta neutralidad valorativa.

4. Reconocimiento del carácter ideológico del derecho y de la necesidad de “poner al descubierto el sentido político de la práctica cotidiana de los jueces y juristas, que construyen el Derecho mientras se ven a sí mismos como un instrumento del mismo” así lo sostiene Duncan Kennedy.

5. Ambivalencia en su postura respecto del Derecho, al que se critica como factor de conservación del status quo y, al mismo tiempo, se le aprecia como instrumento de transformación.

Bibliografía

Legal Education and the Reproduction of Hierarchy (1983)

Sexy Dressing Etc., Essays on the Power and Politics of Cultural Identity (1993)

A Critique of Adjudication (Fin de siècle) (1997)

The Rise and Fall of Classical Legal Thought (2006) y

Legal Reasoning, Collected Essays (2008).

Textos traducidos al español que podemos destacar: 

Izquierda y Derecho. Ensayos de teoría jurídica crítica;

La enseñanza del Derecho como forma de acción política

Libro «Abuso sexual y vestimenta sexy»

En su libro «Abuso sexual y vestimenta sexy», el jurista estadounidense Duncan Kennedy sostiene que el abuso ocupa un lugar central en el imaginario sexual de las sociedades y expresa la persistencia de un régimen patriarcal que trama la desigualdad entre hombres y mujeres, una hipótesis que tiene correlato en las estadísticas de violencia de género y hasta en las expresiones machistas del electo presidente norteamericano Donald Trump.

La escalada de femicidios y otras formas menos drásticas de violencia contra las mujeres que se han instalado en la agenda social de los últimos tiempos no son la expresión de un escenario circunstancial sino la constatación de una estructura atávica de dominación que pone el acento en el sometimiento del sexo femenino, a la vez que lo responsabiliza de alimentar una ambigüedad que abona el terreno para el abuso sexual.

En línea con ese androcentrismo que cifra la cultura y cuenta con la complicidad del sistema jurídico, la crónica policial de los últimos años da cuenta de crímenes horrendos perpetrados contra mujeres que en muchas casos aparecen presentadas casi como instigadoras de la violencia, en tanto con su comportamiento o vestimenta «provocativa» han alentado la alternativa de ser acosadas o violadas.

Duncan Kennedy, profesor emérito de Teorí­a del Derecho en la Universidad de Harvard, retoma en su libro este estereotipo para analizar el peso de las estructuras de dominación en dos campos significativos que operan como formas de intervención política en el régimen del patriarcado: el imaginario sexual y la moda.

En «Abuso sexual y vestimenta sexy», que publicó originalmente en 1993 pero presenta ahora en la Argentina, el ensayista explora las posturas fundamentalistas que señalan al sexo femenino como causante del abuso y analiza su incidencia en la construcción de fantasías sexuales centradas en imágenes de opresión masculina sobre las mujeres.

«Soy un varón blanco heterosexual de clase media intentado asumir mi lugar en la cultura sexual que ha formado mi identidad», dice Kennedy en el inicio de este trabajo publicado por Siglo XXI que se reactualiza a partir de las declaraciones del flamante presidente estadounidense Donald Trump, quien en una grabación difundida hace unas semanas se jactaba de manosear a las mujeres sin su consentimiento, además de referirse a ellas como «cerdas gordas», «perras» y «animales desagradables».

«El abuso sexual o la amenaza de violencia sexual afecta la interacción de hombres y mujeres y el rol que cada uno juega dentro de la relación de pareja porque hasta los hombres que no abusan y no están ni siquiera dentro de ese patrón son beneficiados por estructuras y discursos que dominan la relación entre hombres y mujeres y el intercambio sexual», sostiene Kennedy.