Secreto de las comunicaciones

Empresa no vulneró el derecho a la intimidad de un trabajador despedido al revisar los mensajes personales contenidos en su correo electrónico corporativo tras la desvinculación.

No se aprecia lesión a la intimidad del trabajador, porque como ya se ha expuesto, dispuso de plazo suficiente, dos días, para acceder al correo corporativo y eliminar o reenviar todo el contenido personal del mismo que quisiera preservar, pudiendo también en ese plazo comunicar a sus remitentes una nueva dirección de correo electrónico para esos fines personales.

29 de noviembre de 2023