La presente generación es fiel testigo de como las armas, el hambre y el dolor toman fuerza en el día a día, para esto, Naciones Unidas tiene un rol principal en la prevención de la guerra, la mantención de la paz y la lucha por el desarrollo de los pueblos, ¿será entonces el Derecho Internacional capaz de asegurar la paz entre Palestina e Israel?
Sobre el conflicto contemporáneo
Desde el 2007, año en que Hamás llega al poder, Israel ha mantenido constante actividad beligerante contra palestinos en Gaza; tratos inhumanos; las peores condiciones económicas; insultos y la profanación de la mezquita de Al-Aqsa durante el Talmud. Estas últimas acciones han hecho que la resistencia palestina determinara que no hay otro camino que una respuesta militar total contra Israel.
Es importante recordar que la última vez en que Israel fue atacado por vía terrestre fue en 1973, por lo que la operación “Tormenta de Al-Aqsa” se transforma en la primera gran operación de combate después de cincuenta años, sin considerar el lanzamiento de cohetes por parte de Hamás que se ha mantenido durante los últimos años y que en su mayoría han sido repelidos por Israel a través de su sistema de defensa “Iron Dome”.
Israel, según el Military Strength Ranking del año 2023, se encuentra en la posición N°18 de las potencias militares a nivel mundial (global fire power, 2023), de la misma forma y según expone el Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI) Israel al año 2023 cuenta con un total de noventa ojivas nucleares almacenadas listas para ser empleadas (Stockholm International Peace Research Institute, 2023). Estos antecedentes hacen presumir la superioridad del poderío militar entre las fuerzas israelíes y la realidad militar de Hamás quienes cuentan con el apoyo directo del régimen iraní en la preparación y equipamiento del personal.
Desde los primeros movimientos de Hamás en territorio israelí este último ha hecho uso del Ius Contra Bellum para el repeler los ataques y ha desarrollado una serie de operaciones de eliminación de objetivos beligerantes, entre los que se encuentran las cabezas operativas de Hamás, depósitos de armas y personal combatiente, pero sin respetar el principio de distinción del Derecho Internacional Humanitario, matando civiles que no intervenían en el conflicto.
La tormenta de Al-Aqsa
Cuatro días antes de que estalle la guerra, el líder supremo de la revolución islámica el Ayatolá Jamenei ya había expuesto que:
“La apuesta por la normalización de las relaciones con el régimen sionista es como apostar a un caballo perdedor, condenado al fracaso, perder porque el movimiento palestino hoy está más vivo y preparado que nunca, y el régimen usurpador está muriendo” (Kayhan, 2023).
Por lo tanto, se infiere la intención del líder en aumentar las tensiones y hacer estallar el conflicto contra Israel sin la intención de buscar una solución pacífica y evitar bajas civiles y militares, poniendo en riesgo la vida de miles de personas. Por aquello, por cielo, mar y tierra comenzaron los movimientos de las fuerzas de resistencia palestina en ciudades y pueblos de Israel, así informa el medio iraní Kayhan quienes reportan que aproximadamente a las 06:30 hora local los residentes de Sdirut despertaron por el rugido de los motociclistas de Hamás quienes fueron autorizados por el Comandante en Jefe del brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina don Mohammed Al-Dazif. La operación fue de tanta intensidad que durante los primeros veinte minutos fueron disparados más de 5000 misiles y cohetes hacia Israel.
La tormenta de Al-Aqsa produjo más de mil muertos en tan solo un día, desatando la masacre del festival supernova con un aproximado de 260 jóvenes asesinados por personal de Hamás, de esta forma Infobae señala que “los terroristas irrumpieron en Israel en motocicletas, camionetas, lanchas rápidas y planeadores motorizados, algunos de los cuales se vieron sobrevolando el festival…” (Infobae, 2023), considerando que por otras zonas también se presenciaron combatientes descendiendo con paracaídas para matar civiles israelíes. Debido a este movimiento de Hamás en territorio israelí, este último comenzó una ofensiva directa en contra de objetivos militares lo que ha causado cientos de muertos por daño colateral y la destrucción de infraestructura en Gaza.
Según dispone el Art. 3 del primer Convenio de Ginebra se prohíbe atentados contra la vida y la integridad corporal; toma de rehenes; atentados contra la dignidad y condenas sin previo juicio en contra de “las personas que no participen directamente en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas que hayan depuesto de las armas…” (International Committee of the red cross, 1986), situación que se ha apreciado constante bajo este tipo de ataques tanto por parte de Hamás como de Israel.
El Derecho Internacional y la guerra
El profesor don Hugo Llanos M. expone que el Derecho Internacional es un derecho de carácter imperfecto basándose en el pensamiento de Savigny ya que la comunidad internacional se mantiene en gestación y genera imperfección e inseguridad, asimismo y según Burckhardt al derecho internacional le hace falta positividad; unidad normativa y, por último, la coactividad (Llanos, 1990). Por su parte, Karl Von Clausewitz uno de los más reconocidos y estudiados tratadistas de las ciencias militares contemporáneas conceptualizaba a la guerra en ese entonces como “un acto de fuerza que se lleva a cabo para obligar al adversario a acatar nuestra voluntad” (Clausewitz, 2011), Siendo estos conceptos esenciales para el análisis de esta materia.
Desde la creación de Naciones Unidas (UN) en 1945 se ha establecido como su objetivo natural la prevención de la guerra, la mantención de la paz y el desarrollo de los pueblos, pero sin duda, se ha sido testigo de diferentes conflictos armados durante su historia, por lo que la Corte Internacional de Justicia; las Cortes regionales de Derechos Humanos y la Corte Penal Internacional no han sido totalmente eficaces, independiente de que cada una de estas organizaciones tengan objetivos diferentes.
Por su parte, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas el 08 de octubre de 2023 se ha reunido de emergencia debido al conflicto entre Israel y Hamás, no logrando un acuerdo para tomar medidas en la restauración de la paz conforme al capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas, esto debido a la conformación con la que cuenta hoy el Consejo de Seguridad y a las diferentes motivaciones de sus integrantes (CNN, 2023).
Palabras finales.
Independiente de la existencia de una regulación internacional entre la que encontramos la Carta de constitución de Naciones Unidas, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, los Convenios de Ginebra, el Derecho de la Haya y otras normas internacionales en materias bélicas, se confirma que existiendo o no una regulación internacional; sometimiento por parte de gran parte de los Estados a esta y diversos Tribunales internacionales, el conflicto armado es inevitable si es que una de las partes beligerantes tiene la intención de hacer la guerra, en este caso Hamás tiene la intención expresa de combatir hasta el final e Israel también. (Santiago, 12 de octubre de 2023)
Bibliografía
Clausewitz, K. (2011). De la guerra. Buenos Aires: Editorial Distal.
Global fire power. (2023). 2023 Military Strength Ranking.
International Committee of the red cross. (1986). Los convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949. Ginebra: CICR.
Kayhan. (2023). La tormenta destruyó Israel.
Llanos, H. (1990). Teoria y practica del derecho internacional público. Santiago: Editorial Jurídica de Chile.