El juez Alexandre de Moraes de la Corte Suprema de Brasil, otorgó un plazo de cinco días a la red social X (también conocida como Twitter) para que presente una explicación sobre presuntas violaciones a órdenes judiciales previas. Este requerimiento se enmarca en una investigación en curso relacionada con lo que las autoridades brasileñas han calificado como «milicias digitales». El plazo expira este viernes.
Dichos grupos están acusados de difundir “fake news” y de promover actividades delictivas durante el mandato del expresidente Jair Bolsonaro. Como parte de esta investigación, se han ordenado bloqueos a ciertas cuentas, proceso que ha sido supervisado por el juez Moraes.
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Entre los perfiles involucrados en esta controversia se encuentran destacados blogueros alineados con la administración de Bolsonaro, así como el senador Marcos do Val (Podemos-ES) y comentaristas como Paulo Figueiredo Filho y Rodrigo Constantino. Según las investigaciones federales, los individuos bajo escrutinio han estado utilizando «milicias digitales» que operan desde el extranjero para eludir el cumplimiento de las órdenes judiciales, lo que a agravaría la polarización del discurso al “promover puntos de vista extremistas”.
En respuesta a estas acusaciones, representantes de X en Brasil han declarado que las funciones de la red social no estaban habilitadas para cuentas sujetas a bloqueos. Además, han asegurado que 161 cuentas fueron bloqueadas por orden judicial, mientras que 65 fueron restringidas por órdenes del Tribunal Superior Electoral (TSE).
El CEO de X, Elon Musk, se encuentra bajo investigación, enfrentando acusaciones de «manipulación criminal y fraudulenta», así como de obstrucción de la justicia. Estas acusaciones derivan de su presunta participación en una campaña pública de desinformación y de su negativa a bloquear algunas cuentas calificadas de extremistas por las autoridades, aduciendo que las ordenes violan la libertad de expresión.