El pasado martes 20 de junio, falleció de forma inesperada el profesor y Ministro del Tribunal Constitucional Rodrigo Pica Flores. El profesor Pica fue para muchos un gran maestro, una biblioteca andante de conocimientos y una gran persona con la que compartir. En este día, quiero a través de esta columna rendirle un sentido y merecido homenaje a su trayectoria y trabajo.

El profesor Pica estudió Derecho en la Universidad Central de Chile y perteneció al grupo inicial de estudiantes que inauguraron el Magister en Derecho Procesal Constitucional del Centro de Estudios Constitucionales de la Universidad de Talca. Fue discípulo, al igual que destacados juristas, como el profesor Pierino Perazzo, del profesor Juan Colombo Campbell, aunque cabe precisar que, mientras el profesor Perazzo siguió la línea de investigación del Derecho Procesal, el profesor Pica ha sido un continuador de los estudios del Derecho Procesal Constitucional, área del Derecho que el “maestro Colombo”, como siempre se refería Rodrigo a este último, ha trabajado incansablemente para impulsar siendo sin duda el más grande exponente de nuestro país en esta área, convirtiéndose el profesor Pica, a su vez, en uno de sus grandes exponentes a nivel nacional y compartiendo esta cátedra con su gran maestro en la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile.

Inició su trayectoria dentro del Tribunal Constitucional, siendo Abogado Asistente, para luego pasar a ser Relator y Secretario de la máxima magistratura constitucional. Sin duda, era una de las personas que mejor conocía el trabajo dentro del Tribunal Constitucional, lo que lo convertía en un jurista que manejaba a la perfección la tramitación dentro del tribunal y su jurisprudencia, lo que lo llevó a ser considerado por la Corte Suprema de Chile el año 2020, el candidato más apto para ser Ministro dentro del Tribunal Constitucional, un puesto que todos aquellos que lo conocimos, sin duda, consideramos merecido.

En el ámbito académico el profesor Pica era un erudito del constitucionalismo y de la litigación constitucional, impartiendo las cátedras de Derecho Constitucional, Derecho Procesal y Derecho Procesal Constitucional en múltiples casas de estudios del país, tanto en sus escuelas de pregrado como de postgrado, ganándose siempre el cariño y respeto de sus alumnos, con los cuales nunca dudaba en compartir su inagotable conocimiento fuera del aula. También, pudo realizar múltiples publicaciones en diferentes revistas y capítulos de libros que se publicaron dentro y fuera del país, destacando quizás, su aporte al entendimiento de la tramitación de los recursos de inaplicabilidad por inconstitucionalidad e inconstitucionalidad en su obra “Control Jurisdiccional de Constitucionalidad en Chile: Los Procesos de Inconstitucionalidad y de Inaplicabilidad de Competencia del Tribunal Constitucional”, publicado en su primera edición el año 2010.

En lo personal conocí al profesor Pica en múltiples facetas. Como profesor, fue la persona que me introdujo al mundo del Derecho Procesal Constitucional, siendo mi profesor en dicha cátedra y en el taller de memoria: “El Tribunal Constitucional de Chile, Teoría y Práctica”, ambos en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile, cátedras en la que posteriormente trabajaría como ayudante colaborador, teniendo, el Profesor Pica, mucha injerencia en la investigación de mi memoria de grado, aun sin ser mi profesor guía. A su vez, tuve el honor de tener clases con el en el Magister en Derecho Constitucional del Centro de Estudios Constitucionales de la Universidad de Talca, programa de magister que el mismo me recomendó cursar para profundizar mi carrera académica en el constitucionalismo. También, tuve el honor que fuera mi jefe, al realizar la pasantía de la Secretaría del Tribunal Constitucional durante el año 2017, en donde pude compartir con él cuando era el Secretario del Tribunal. Por último, como colega, tuve el honor de compartir más de una copa de vino con él, compartiendo más de una ocasión una cata de vinos en su casa y presenciando las cátedras que realizaba en el pasatiempo que más lo apasionaba, la enología. Sin duda, un gesto que jamás olvidaré es que fue uno de los asistentes ilustres en el lanzamiento de mi libro: “El Veto Presidencial: Historia, Regulación y Práctica”, tomándose un tiempo en su ajetreada agenda para compartir conmigo aquel momento.

El profesor Pica será extrañado por todos los que lo conocimos, tanto por su aporte gigante al estudio del Derecho Procesal Constitucional como por su amabilidad y carisma. Sin duda, Chile ha perdido a un coloso del constitucionalismo, un jurista que nos dejó a una corta edad aportes enormes para el estudio de la justicia constitucional y que considero sin duda uno de mis grandes maestros. Por estas razones he querido con mucha tristeza escribir esta carta de homenaje, para dejar registro público de sus virtudes.

Hasta siempre maestro.

Carlos Clemente V.