Por Ignacio Sánchez Samarin para Diario Constitucional

Leonardo Escárate, abogado de profesión y candidato Independiente a la Convención Constitucional por el Distrito 2 de la Región de Tarapacá, conformado por las comunas de Alto Hospicio, Camiña, Colchane, Huara, Iquique, Pica y Pozo Almonte, forma parte de la lista de Autonomía Social y Sindical de Tarapacá.

El abogado de 38 años participa en el Ciclo de entrevistas organizado por al Diario Constitucional y la Escuela de Periodismo de la Universidad Mayor de cara a las elecciones del próximo 15 y 16 de mayo. Sus definiciones, propuestas y sus ganas de «construir un mundo mejor» en la siguiente entrevista.

¿Cuál es una de sus principales visiones con respecto al proceso constituyente?

El proceso yo lo veo como algo saludable. Sin bien es cierto, no es lo que todos estábamos demandando en las calles, lo que todos queríamos. No es la Asamblea Constituyente. No es el poder constituyente originario en sí mismo. Sin perjuicio de ello, me parece saludable dejar atrás la Constitución de la dictadura, poder cambiar de una vez por todas el ropaje que viste a nuestra sociedad, y, me parece saludable que tengamos la oportunidad (de cambiarla). Los ciudadanos de poder participar, aunque sea con muchas limitantes. Así mismo, saludo el hecho de tener paridad de género, una situación que es histórica tanto a nivel nacional, como mundial.

¿Qué tan cierto es que la redacción de una nueva Constitución será “de cero”?

Me parece que »la hoja en blanco» es más bien una metáfora. La ley 21.200 establece ya unos límites iniciales en relación con el respeto por los Tratados Internacionales. En ese sentido, es que torna peligroso la situación del TTP11  y el interés en que no se suscriba a este tratado (Chile).

Creo que además existe cierta tradición republicana en nuestro país, que seguramente pedirá consensos que habrá que respetar. Más allá de que sea válida la postura de querer cambiarlo todo, creo que el hecho del quórum de los 2/3 obligará también a llegar a ciertos consensos que impliquen que parte de la institucionalidad se mantenga.

Adicionalmente a las demandas históricas y que sin duda son centrales para la sociedad como pensiones, salud, educación, vivienda, entre otros, ¿qué elementos y temas deberían ser considerados en la elaboración de una Constitución moderna?

La reestructuración y redistribución del poder. Esta es la oportunidad que tenemos de establecer una nueva forma de gobernar, una nueva forma de hacer las cosas, mediante un sistema que deje atrás la democracia representativa y dar paso a una democracia directa, en la cual el gobierno pertenezca a los ciudadanos, pertenezca al pueblo, pertenezca a la gente y se ejerza a través de mecanismos de control de poder que nos permitan participar de las grandes decisiones.

¿Cómo se puede asegurar que la ciudadanía se mantenga conectada con el proceso constituyente y de qué manera concibe usted el rol de la sociedad en este proceso?

Lamentablemente, el contexto de la pandemia implica que haya cierta desinformación. Sin perjuicio de lo cual creo que es obligación de la ciudadanía participar no sólo con su voto el día 10 y 11 de abril, sino que también hacerse parte del proceso de forma posterior. No permitiendo que los convencionales vayan a la convención a decidir nuevamente entre 4 grandes paredes, sino que de cara a la ciudadanía. Hay que seguir participando, hay que seguir haciendo asambleas, hay que seguir realizando cabildos, seguir exigiendo, seguir fiscalizando y, en definitiva, que aquellos que vayan a la convención representen al resto de los ciudadanos.

Por lo que ha podido percibir durante la campaña, ¿existen problemáticas similares en las comunas que componen el distrito 8?

Los derechos sociales son prácticamente unánimes. Donde uno vaya se menciona educación, salud, vivienda. Son necesidades que la gente tiene muy arraigadas, vinculadas al concepto de la dignidad, que también ha sido el concepto con el cual todo este proceso se ha enmarcado.

La situación del agua y la contaminación ya no da para más en la zona las compañías mineras están secando nuestros valles y los relaves contaminando los cultivos y con ellos las tradiciones de los pueblos originarios.

¿Cómo enfrentar la redistribución de agua en su zona?

El agua tiene que ser considerado un derecho fundamental. No como un bien nacional de uso público. Hay que limitar el uso de esta en las grandes compañías, ya sean mineras, pesqueras o cualquier otra. Si quieren utilizar el recurso hídrico, tendrán que saber utilizar la tecnología para, por ejemplo, instalar plantas desalinizadoras o alguna otra alternativa que les permita generar este recurso sin que eso implique estar secando aún más el desierto.

¿Está de acuerdo con la propuesta que plantea declarar al medio ambiente como sujeto de derecho?

Lo básico es establecer la protección del medio ambiente como un derecho fundamental. Todos los chilenos tenemos derecho al medio ambiente, por lo tanto tenemos que cuidarlo, protegerlo y salvaguardarlo. Es necesario, establecer un modelo de desarrollo total y absolutamente distinto, que tenga el carácter de un modelo de desarrollo sustentable, en el cual de la mano de la ciencia y la tecnología podamos cambiar la forma de hacer las cosas. La economía no debe estar por sobre cualquier cosa. El medio ambiente es mucho más importante que el desarrollo en sí mismo.