No todas las ofensas verbales son acreedoras a la sanción de despido, sino aquéllas que injustamente ataquen al honor de la persona; y siempre que ello se realice dentro de la esfera de la relación laboral o con ocasión de ella, pero sin que deba fijarse en forma objetiva, sino que ha de conectarse con la ocasión en que las ofensas se infirieron por el trabajador al superior, y sus circunstancias de lugar y tiempo.
Proporcionalidad de la sanción
Sanción de 50 días sin empleo ni sueldo impuesta a trabajador que insultó reiteradamente a sus compañeros de trabajo se ajusta a derecho, resuelve tribunal español.
Instalación de cámaras ocultas en el lugar de trabajo para descubrir al autor de un hurto no vulnera la intimidad de los trabajadores, resuelve un tribunal español.
Países Bajos afectó la libertad de reunión de manifestantes que se opusieron al desalojo de una propiedad ocupada ilegalmente.
Sanción contra psicóloga que manifestó a víctima de violencia de género que le daba igual “si la matan”, se confirma por Tribunal español.
La falta por la que ha sido sancionada la demandante reviste una cierta gravedad y no se considera que la misma, en este caso concreto, teniendo en cuenta las circunstancias, haya de ser atenuada por el alcoholismo que pudiera padecer la demandante, el cual puede incluso constituir una segunda falta disciplinaria.
Abogado es condenado a 4 años de cárcel por insultar al rey de Tailandia.
La ley de lesa majestad de Tailandia tipifica como delito los insultos contra la monarquía. La aplicación de esta ley ha enfrentado críticas generalizadas por sus duras penas y sus contravenciones al debido proceso.
Sanción impuesta a trabajador municipal que faltó 227 veces a su trabajo durante 3 años es razonable
No hubo tolerancia porque cada vez que el actor faltó injustificadamente a su trabajo se procedió al descuento de su salario. No hubo dejación de la facultad disciplinaria que se ejercitó dentro del plazo de prescripción. Tampoco actuación maliciosa del demandado tendiente a dejar pasar el tiempo para que el actor incurriera en más ausencias injustificadas y así poder imponer una sanción mayor, razona Tribunal español.
Trabajador despedido por insultar a su jefe durante una videollamada debe ser indemnizado por falta de proporcionalidad en la sanción.
Si bien la proporcionalidad entre el incumplimiento y la medida sancionatoria queda sujeta a la ponderación judicial, este ejercicio debe efectuarse considerando parámetros verificables, que nos aproximen a las nociones de adecuación, necesidad y proporcionalidad.
Expulsión de socio del Club de Tenis Santiago por referirse en términos desafiantes hacia el Directorio es desproporcionada y contraria al debido proceso, resuelve la Corte de Santiago.
Si bien el recurrente se expresó en contra del Directorio de manera desafortunada, la Corte estimó que los dichos no constituyen una infracción de la envergadura necesaria para aplicar la máxima sanción establecida en los estatutos.