Georgia vulneró la libertad de expresión de mujer detenida durante una protesta ciudadana: sus actos fueron una manifestación legítima de sus creencias políticas.
La libertad de expresión protege no solo la sustancia de las ideas y la información expresada, sino también la forma en que se transmiten. En consecuencia, incluso si la conducta del solicitante pudiera haber justificado una intervención de las autoridades, estas deben haber sabido que la sanción privativa de libertad se estaba aplicando en el contexto del ejercicio de una libertad fundamental.