Los actos recurridos importan una perturbación del derecho a la propia imagen del actor, consagrado en el número 4 del artículo 19 de la Constitución Política de la República.
De este modo, el máximo tribunal revocó la sentencia de la Corte de Rancagua.
El mismo asunto que ha servido de sustento a la acción constitucional promovida en estos autos se ha denunciado ante la Fiscalía Local de Las Condes.
La recurrente indicó haberse infringido el derecho a la integridad psíquica de la persona, la igualdad ante la ley y el debido proceso.
El artículo 453 del Código del Trabajo dispone que la excepción de prescripción debe ser resuelta en la audiencia preparatoria del juicio oral.
La motivación del acto que se impugna no guarda ninguna relación con lo estipulado en la contrata.
El fallo fue acordado con los votos en contra de los Ministros Sandoval y Prado.
Se afectó la libertad de trabajo del recurrente garantizada en el numeral 16º del texto político.
De este modo, la Corte Suprema confirmó la sentencia de la Corte de Arica.
No es una materia que corresponda ser resuelta por medio de la presente acción cautelar.
