Venta de teléfonos y dispositivos móviles con obsolescencia programada, se prohíbe por la Cámara Baja.
La iniciativa prohíbe la venta y comercialización de todo tipo de teléfonos y dispositivos móviles, cuya funcionalidad haya sido alterada arbitrariamente, en su diseño o por medio de actualizaciones posteriores del software, que busquen acelerar el fin de la vida útil.